CARRERA MILITAR
La primera noticia que tenemos de él se refiera al año 1863, año en el que debió ingresar como Interventor militar en el ejército de Tierra, en el cuerpo de ejército de Andalucía.
- En 1875, como consecuencia de su participación en la acción militar de Treviño, en la última Guerra Carlista, fue ascendido al grado de Oficial Primero.
- De nuevo la Guía de Sevilla, ahora de 1877, lo menciona como Comisario de Guerra, personal 2ª efectivo.
- En los años siguientes, al menos hasta 1887, aparece citado como "oficial pagador" y "pagador de fortificación".
- En 1890 es condecorado con una medalla por su participación en el sitio de Bilbao.
- En los primeros meses de 1893, como Comisario de Guerra, aparece comisionado en Huelva y Moguer para preparar servicios de suministros de subsistencias y utensilios.
- En diciembre de 1893 es destinado al ejército de operaciones de África como Comisario de Guerra de 2ª.
- En 1896, por sorteo de oficiales de la Administración Militar, es destinado a prestar sus servicios en la isla de Cuba. Así lo citan diferentes periódicos de los días 4 y 5 de marzo de 1896 (La Correspondencia de España, El Imparcial, El Siglo Futuro, La Iberia,...):
"Sorteo para Cuba. En el Ministerio de la Guerra se ha verificado ayer un sorteo para cubrir en el ejército de la isla de Cuba unas plazas de comisario de Guerra de segunda clase [...]. La suerte ha designado a los señores siguientes:
Comisario de Guerra de segunda clase: D. Braulio Navas Villalobos".
- En 1897, el 14 de octubre, el periódico La Unión Católica al dar noticias de la Guerra de Cuba informa del ascenso de Braulio Navas al empleo superior inmediato en la Administración Militar; es decir, es nombrado Comisario de Guerra de 1ª.
Tras el hundimiento del Maine en febrero de 1898 y los acontecimientos posteriores, la guerra de Cuba se daba prácticamente por perdida, por lo que se inició la repatriación del ejército que estaba allí establecido. La Revista de Navegación y Comercio del día 15 de julio de 1898 aporta una relación de pasajeros de importación en la línea Cuba-Méjico, en el vapor Alfonso XII; en esta relación, entre los pasajeros, aparece mencionado Braulio Navas Villalobos.
A partir de este momento no hemos encontrado más datos de la carrera militar de D. Braulio Navas Villalobos: es de suponer que con una edad próxima a los 60 años y después de haber participado en las guerras carlistas, en la guerra de África y en la guerra de Cuba sería licenciado del ejército concluyendo su carrera militar.
CASINO MILITAR DE SEVILLA
Otro aspecto de la polifacética vida de Braulio Navas, aún relacionado con su carrera militar, pero desde un punto de vista más lúdico, fue su participación en el Casino Militar de Sevilla en el que intervino activamente desempeñando, entre 1885 y 1890 diferentes cargos (presidente, vicepresidente, vocal,...). En concreto, sabemos que en 1885 era el presidente de dicho Casino Militar, y en calidad de tal presidente, tal y como refleja el periódico La Iberia del día 29 de agosto: "Digno de verdadera alabanza es el acuerdo adoptado por el Casino militar en la sesión que se celebró ayer bajo la presidencia del Sr. D. Braulio Navas. Dando prueba de su patriotismo, por unanimidad acordó abrir una suscrición para adquirir un crucero que lleve el nombre de Sevilla y que sea producto de las suscrición en esta provincia".
AFICIONADO A LOS TOROS Y AL FLAMENCO
Más allá de su actividad militar, Braulio Navas destacó como un importante aficionado a los toros, probablemente fue algo más que un simple aficionado, tal como hemos podido constatar en noticias aparecidas en diversos medios de prensa de la época. El enano (un suplemento del Boletín de Loterías y de Toros) del 5 de junio de 1881, al hacer la crónica de la corrida de toros celebrada el día 25 de abril indica que el torero El Gallo "brindó la muerte del cornúpeto a D. Braulio Navas, por su salud e inteligencia, agregando que lo hacía sin interés de ninguna clase".
El mismo Boletín de Loterías y Toros del 26 de noviembre de 1883 hace la siguiente crónica sobre un tentadero de becerras:
"Nos dice nuestro corresponsal de Sevilla: 'Como le dije a V. en mi última, el jueves por la tarde salimos de esta hacia el cortijo de Tíjer, donde tiene el cerrado Dª. Teresa Núñez del Prado; en él pasamos una noche alegre y divertida, siendo los héros de la fiesta el banderillero Francisco Sánchez (Tenrreiro) y el inteligente aficionado D. Braulio Navas, que tocó a las mil maravillas lo propio de estas faenas [...]; se tentaron 32 becerras [...]: la lidia de estos becerros fue dirigida por D. Braulio Navas y el picador Paco Fuentes".
No sólo debió ser un simple aficionado a los toros; también debió pertenecer, como hemos visto, al círculo de amistades de algunos toreros. En 1895 Braulio Navas acude al entierro del torero Antonio Sánchez y García (El Tato). La revista El Toreo de 11 de febrero de dicho año relata:
"En la mañana del día 8 se celebraron en la iglesia de San Bernardo los funerales por el alma del celebrado espada, asistiendo al acto numerosa concurrencia. Entre las personas que formaban en la fúnebre comitiva figuraban [...], el comisario de Guerra D. Braulio Navas [...]. Cerraban la comitiva más de 60 coches".
Hemos encontrado una curiosa narración sobre la afición taurina de D. Braulio Navas, de la que no tenemos más veracidad que el texto que citaremos a continuación; en un blog cordobaincoming.com se hace una crónica sobre el torero Lagartijo, al que se califica como el primer Califa del Toreo; el autor del blog escribe:
"en su dilatada vida como lidiador, Lagartijo no sólo tuvo que hacer frente a los astados dentro de los cosos, si no que fuera de ellos también tuvo que bregar con bureles de sentido muy desarrollado como D. Braulio Navas y sus secuaces, un grupúsculo de aficionados sevillanos, que no pudiendo sufrir la primacía en los ruedos del torero cordobés y no encontrar ningún torero que oponerle que pudiera hacerle sombra, no se les ocurrió otra cosa, que zaherirle tocando unas campanillas durante sus actuaciones, llegando a desplazarse a cuantas ciudades estaba anunciado Rafael [Lagartijo], esperando el más mínimo fallo, provocando incidentes y altercados como el que personalmente sostuvo Lagartijo con D. Braulio. Hasta tal punto llegó su actitud que Lagartijo tomó la decisión de no torear más en Sevilla, que era el único propósito al que podían aspirara ante la imposibilidad de encontrarle un rival a su altura".
RELACIÓN DE D. BRAULIO NAVAS CON HERVÁS
Ya mencionamos algún aspecto sobre esta relación en la entrada anterior, cuando conocimos la compra de terrenos por Braulio Navas en lo que entonces eran las afueras de Hervás en 1901.
Además hemos comprobado, como aparece reflejado en el periódico La Correspondencia de España del día 1 de agosto de 1899, en una crónica sobre Veraneo, que se cita a Braulio Navas como una de las personas que se encuentran descansando en Baños de Montemayor (en una relación en la que se citan personalidades como nobles, deanes, senadores, generales,...).
Por lo tanto, sabemos que D. Braulio Navas frecuentaba el valle del Ambroz en los últimos años del siglos XIX y primeros del siglo XX... y sabemos que adquirió terrenos en esta zona de la Alta Extremadura y, muy concretamente, en el término municipal de Hervás (aunque quizá también en otros municipios), conviertiéndose en un terrateniente con un amplio abanico de relaciones sociales como hemos podido observar.
De momento, no tenemos más referencias biográficas de D. Braulio Navas Villalobos; desconocemos aún la fecha de su fallecimiento -igual que desconocemos la de su nacimiento-, pero sospechamos que ésta debió producirse entre 1915 -escritura de donación del edificio-escuela a Hervás- y 1927: en este año 1927 se publicó el libro Estridencias del poeta y periodista nacido en Guareña (Badajoz) Ángel Braulio Ducasse Gómez; en este libro aparece la siguiente dedicatoria: "a la memoria de mi tio y padrino D. Braulio Navas Villalobos". Esta escueta dedicatoria nos hace pensar que Braulio Navas ya habría fallecido antes de la publicación del libro. Lo que nos ha extrañado enormemente es no haber encontrado ninguna referencia a su fallecimiento en las actas de pleno del Ayuntamiento de Hervás a pesar de lo mucho que la hemos buscado, ya que era normal dar oficialmente el pésame de personas conocidas de la localidad.
Finalizamos la entrada con el retrato literario que hizo de Braulio Navas el articulista Enrique Polo de Lara en el periódico El Liberal de Sevilla, en el ejemplar del día 26 de octubre de 1916 -artículo que ya citamos en la entrada anterior-:
"Braulio Navas, el de movida juventud, el clásico inteligente del toreo, que tanto temieron ó halagaron las más preciadas estrellas de la tauromaquia; el asiduo visitante del militar Casino, en donde cotidianamente se le ve arrellanado en cómoda butaca, siempre cubierto con el típico sombrero de anchas y rectas alas, es el altruista que, cediendo al pueblo de Hervás terrenos suyos, buenos y centrales, ha levantado además, de su particular peculio, una hermosa y moderna escuela graduada, para el bien de aquellos niños del hoy y del mañana, futuros ciudadanos".
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